En nuestro último taller abordamos las complejas preguntas: ¿qué es ser varón? y ¿qué es ser mujer?
Sabemos que definir los estereotipos de varón y de mujer según lo indica nuestra sociedad es más sencillo porque basta con enumerar una serie de características bien delimitadas para saber cuál es el concepto de hombre y de mujer que tiene nuestra sociedad.
Sin embargo, cuando nos enfrentamos con esta pregunta empezamos a ver cuántas cosas que creíamos de hombre son realizadas por muchas mujeres (quizá el fútbol?); o tareas que se supone son típicamente femeninas, comienzan a desarrollarse por varones (cocinar, planchar, entre otras), esto da cuenta de que ser hombre o ser mujer no se define por lo que hacemos cotidianamente, ni por nuestros gustos. Es tan válido que a un hombre le guste confeccionar prendas como a una mujer, en igualdad de pensamiento decimos, es tan aceptable que una mujer trabaje en la construcción como que lo haga un hombre.
Entonces, ¿por qué seguimos sintiendo comentarios que van en contra de los derechos sexuales?
Los cambios requieren de tiempo, los cambios se dan a través de procesos; tenemos que apreciar que vamos en camino a la equidad de género; cuánto nos queda por recorrer, no lo sé, pero seguro es que si entre todos pensamos en esto ese camino se acortará.
Empecemos a hacer pequeños cambios en nuestras actitudes y quizá muchos empiecen a ver los beneficios de flexibilizar esos estereotipos que nos perjudican a mujeres y a varones!
Los invito a seguir pensando en SER VARÓN y SER MUJER....
